Servicio integral para pacientes con Parkinson, la misión de Apropark
Hace algo más de 20 años nació en Bueu una pequeña asociación, denominada Asociación Parkinson Galicia Bueu, con el objetivo de cuidar y acompañar a las personas que sufrían esta enfermedad. No tardaron mucho en ampliar su radio de actuación. Así, en 2013 llevaron su labor hasta Vilagarcía de Arousa y, en 2019, a Pontevedra. Como consecuencia, tuvieron que cambiar su nombre al actual: “Asociación Parkinson de la provincia de Pontevedra.
A día de hoy, centran su actividad en “mejorar la calidad de vida de las personas afectadas y la de sus familiares”, y lo logran ofreciendo un servicio multidisciplinar del que hoy disfrutan unas 180 personas. Y es que, a través de diferentes campos, como la psicología, la logopedia, la fisioterapia o el trabajo social, pretenden acompañar al enfermo y a su familia en todas las problemáticas derivadas de la enfermedad que puedan surgir.
El proceso para lograr esta atención personalizada se basa en tres fases: una primera de conocimiento, en la que “hacemos una entrevista de aproximadamente una hora, que nos ayuda a saber si podemos dar respuesta a las necesidades de la persona”, señalan; una segunda de valoración profesional, donde “se hace una valoración por parte de profesionales y se desarrolla un plan de atención individual y personalizado para cada persona”, explican; y una última de seguimiento. Esta se realiza cada cuatro meses y pretende examinar la evolución de cada paciente para adaptar el cuidado de la mejor manera posible”.
Tanto es así que desde Apropark cuentan con un equipo de profesionales dedicado a cada ámbito en el que centran sus cuidados, desde la logopedia hasta la terapia cognitiva o la física. Este cuidado tan especializado se nota en la cantidad de demandantes, que ha aumentado notablemente en los últimos años.
En este sentido, y con ese afán de seguir creciendo y poder llegar a mucha más gente, la asociación decidió acudir a la IV Convocatoria del Plan Social Ence Pontevedra. Consiguieron ser beneficiarios y lograron una ayuda que, admiten, “nos ayuda mucho, entre otras cosas a garantizar un salario digno a nuestros trabajadores”. Y la estabilidad que da contar con un equipo propio permite a Apropark ofecer un mejor servicio que, esperan, aumente en los próximos años. “Necesitaríamos un local mucho más grande para hacer muchas más actividades, y que se adapte a nuestras necesidades; ahora mismo estamos con lista de espera, porque no podemos asumir más pacientes”, consideran.
Para ello, agradecen la ayuda del Plan Social y esperan seguir contando con ella. Entre sus próximos objetivos se encuentran los de conseguir un nuevo centro de mayor tamaño en Pontevedra o recuperar algunas actividades para los pacientes, como la de piscina. Confían en hacerlo y en “llegar al máximo número de personas”, concluyen.