La ‘Volta a nado Illa de Tambo’ junta en su tercera edición a 270 participantes en un fin de semana repleto de deporte y turismo
El mundo de las travesías a nado no deja de crecer en nuestro país. Con más de 350 pruebas repartidas por la península, cada verano miles de personas se lanzan al agua con ganas de superarse a mismos y pisar la arena una vez terminada la prueba con esa sensación de euforia propia de quien supera un desafío.
Este pasado 28 de julio en la Praia da Chousa se dieron cita 270 personas para participar en la que fue la tercera edición de la ‘Volta a nado Illa de Tambo’. Esta travesía nació en 2022 después de que los organizadores viesen el potencial que tenía la isla de Tambo, al fondo de la ría de Pontevedra, para convertirla en la protagonista de una prueba que es “mucho más que una travesía”, destaca Beatriz Alvariño, directora del evento deportivo.
Esta vuelta a nado ha ido creciendo de la mano del Plan Social de Ence Pontevedra y actualmente ya cuenta con tres distancias diferentes enfocadas para distintos públicos: una primera de 1000 metros, para los más jóvenes o recién iniciados en el mundo de la natación en aguas abiertas; otra de 4500 metros, que consiste en un trayecto de ida y vuelta a la Isla; y la distancia de 6000 metros, en la que los nadadores rodean por completo la Isla de Tambo para posteriormente volver al punto de partida en la Praia da Chousa.
Todo ello sucede, como afirma Beatriz, “en uno de los entornos más espectaculares de las Rías Baixas” y por ello, en esta última edición, la organización de la travesía no se limitó simplemente a desarrollar ésta, sino que se programó para el día anterior una serie de actividades turísticas y culturales por la zona, tales como una visita guiada por la Isla o un encuentro en las bateas para mostrar el proceso de cría del mejillón acompañado de una degustación.
Actividades que hacen de este evento beneficiario del Plan Social una “experiencia multisensorial en la que deporte y turismo unen fuerzas para promocionar al completo las Rías Baixas y los hábitos de vida saludables”, asevera Beatriz. La directora ha querido destacar también las “condiciones idóneas” en las que transcurrió la travesía con una “temperatura del agua de 18 grados y un mar en calma”, lo que permitió que no se produjesen abandonos en ninguna de las tres disciplinas.
Beatriz se muestra agradecida al Plan Social por su apoyo ya que, como ella afirma, “se necesitan muchos recursos y material tanto dentro como fuera del agua para que este tipo de pruebas se realicen sin problemas y garantizando la total seguridad de los nadadores”.
Asimismo, confía que en próximas ediciones esta ‘Volta á nado Illa de Tambo’ siga creciendo de la mano de Ence Pontevedra con la inclusión de más distancias y otro tipo de actividades lúdicas para seguir proporcionando, mediante el deporte y el turismo, una experiencia única a todos los participantes.