Marín Peixegalego: “Queremos que el club contribuya en la formación de los niños y niñas, como personas para la sociedad”
El Marín Peixegalego se conoce con ese nombre desde la temporada 2004/2005, año en el que se fundó este club que daba continuidad al legado del San Narciso Peixefresco, creado en 1989 por el colegio que recibe el mismo nombre. Sus más de dos décadas de historia lo definen como “un club de cantera cuyo objetivo es promover la adquisición de valores a través de la práctica del baloncesto”, en palabras de Antonio Casal, presidente del mismo.
Sin embargo, esto no es todo lo que va en la esencia de esta institución marinense. Y es que, quizá no desde el principio, pero el mismo Casal afirma que también “es difícil entender el Peixe sin ENCE en estos últimos tiempos”. Club y empresa llevan ligados desde hace casi una década y fue precisamente en la temporada 2015/16 cuando desde el equipo decidieron incluir a Ence en el nombre de su primera plantilla, “en agradecimiento por el apoyo que Ence nos ha brindado”, relata Casal.
Desde la puesta en marcha de la primera edición del Plan Social Ence Pontevedra, en 2017, el Marín Peixegalego ha estado presente en todas las ediciones, buscando con los proyectos que han presentado que todos/as los/as niños/as que pasan por la disciplina puedan “adquirir hábitos saludables, de compañerismo, integración… y de salud física propiamente dicha”, destaca el Presidente.
Como no podía ser de otra forma, en la última edición del Plan Social, los marinenses acudieron una vez más a la iniciativa social para “afianzar el proyecto y darle el ‘brío’ que tenía antes de la pandemia”, señala Casal. Para ello, presentaron un proyecto a la convocatoria que tiene cinco patas. En palabras del club, “la educación a través del deporte, afianzar un proyecto de cantera, impulsar un aula de hábitos saludables, la celebración de campus en periodos no lectivos y la organización de eventos”, resumen.
Con la ayuda pretenden “ser un agente útil en el crecimiento y la formación de los chicos y chicas que pasan por el club e intervenir positivamente en nuestro entorno más próximo a nivel dinamizador y de ocio”, indica Casal. Por ello, a través de estas cinco patas quieren potenciar la educación en valores, mejorar el material técnico y humano, impulsar talleres de hábitos saludables y ponerlos en práctica en los campus, así como “atraer turismo y dinamizar económicamente la zona, con eventos como el Torneo de Selecciones Autonómicas”, aseguran.
En este sentido, algunos de esos objetivos ya se han ido cumpliendo en lo que llevamos de temporada y, desde la institución, afirman que de manera muy positiva. “Hemos empezado este año con más entrenadores/as y una preparadora física de máximo nivel; nuestra aula de salud ya ha realizado varios talleres; hemos organizado ya un campus y hay varios programados, además del torneo mini de selecciones autonómicas y las concentraciones Babybasket”, sintetiza Casal.
Con estos resultados, el Marín Peixegalego se muestra muy contento y desde el club confían en que todos estos avances les ayuden a construir su objetivo como club: “que el papel del club sea reconocible en la formación de esos/as niños/as como personas para la sociedad, y que en un futuro sean ellos y ellas los que den continuidad a este proyecto de baloncesto en Marín, como directivos/as, voluntarios/as, entrenadores/as, …”, asiente Casal.
Para lograrlo, desean que su proyecto siga vivo en los próximos años: “nuestro sueño es seguir creciendo en número de integrantes”, relatan, y para ello no dudan en seguir contando con Ence. “Ence es un pilar central en nuestro proyecto”, concluye Casal.
